La belleza de una mujer no solamente tiene que ver con lo
exterior sino con lo interior. Tiene que ver con nuestra alma, lo espiritual de
nuestro ser. Esta belleza es fruto de la combinación de varios factores, siendo
el principal, para nosotras, nuestra relación con Dios por medio de nuestro
Señor Jesús.
El apóstol Pablo hace mención de la belleza de Cristo que
puede y debe manifestarse en nuestra vida:
Sin embargo, gracias a Dios que en Cristo siempre nos lleva
triunfantes y, por medio de nosotros, esparce por todas partes la fragancia de su
conocimiento. Porque para Dios nosotros somos el aroma de Cristo entre los que
se salvan y entre los que se pierden (II Cor. 2.14,15 NVI).
Vamos a considerar algunas cosas que apañan la belleza de
Cristo en nosotras. Por ejemplo:
1) Por no aceptar el perdón de Dios por nuestros pecados pasados,
ya confesados con sincero arrepentimiento. Su perdón es total y completa. A los
ojos de Dios lo que vale, no es mi esfuerzo, sino fe y transparencia delante de
él.
Pero si vivimos en la luz, así como él está en la luz, tenemos
comunión unos con otros, y la sangre de su Hijo Jesucristo nos limpia de todo
pecado (I Jn. 1.7).
2) Por nuestra falta de fe, por las dudas, el temor:
Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o
beberán; ni por su cuerpo, cómo se vestirán. ¿o tiene la vida más valor que la
comida, y el cuerpo más que la ropa? (Mt. 6.25 NVI).
3) Por no valernos del poder de Dios:
Por último, fortalézcanse con el gran poder del Señor.
Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas
del diablo (Efe. 6.11 NVI).
4) Por la autocompasión: La autocompasión es un mal que acarrea
consecuencias inesperadas. Uno se pregunta: "¿Por qué esto me pasó a
mí?" De ahí uno se aísla y se encierra en su pequeño mundo. Pero el Señor
quiere sacarnos de nuestra autocompasión. La historia de Elías nos puede
animar. (Ver I Reyes 19.) Después de la gran victoria de Elías sobre los
profetas de Baal, le vino temor por las amenazas de la malvada Jezabel. Él
huyó, fue al desierto y allí, lleno de auto compasión, deseaba morir! (Ver I
Reyes 19)
5) La autocompasión puede producir la depresión. Una de las
mejores maneras de vencer la depresión es por quitar los ojos de uno mismo y
mirar a su alrededor: hay muchos otros que sufren más que una misma. Debemos
entonces extender la mano a una persona necesitada, visitar a un enfermo,
procurar levantar el ánimo a otra persona deprimida. O sea, ser útil.
6) Si somos esclavas de nuestras emociones, damos lugar a la
ansiedad, inclusive al enojo y aún al odio. No debemos dar rienda suelta a
nuestra mente e imaginaciones para así terminar viendo las cosas de modo
desproporcionada. Nos corresponde llevar cautivo todo pensamiento y sujetarlo a
Cristo (II Cor.10.5)
Conclusión:
Nuestra belleza femenina interesa a Dios. Leemos en I Pedro
3.3,4 -y lo cito en las dos versiones-:
Vuestro atavío no sea el externo de peinados ostentosos, de
adornos de oro o de vestidos lujosos, sino el interno, el del corazón, en la
incorruptible adorno de un espíritu afable y apacibles, que es de grande estima
delante de Dios.
Que la belleza de ustedes no sea la externa, que consiste en
adornos tales como peinados ostentosos, joyas de oro y vestidos lujosos. Que su
belleza sea más bien la incorruptible, la que procede de lo íntimo del corazón
y consiste en un espíritu suave y apacible. Ésta sí que tiene mucho valor
delante de Dios.
¡Es hermoso ser mujer! Una mujer se realiza reconociendo su
valor para Dios, desarrollando su inteligencia y capacidades, cuidando su
apariencia y sirviendo a otros.
LA MUJER REALIZADA COMO PERSONA
(1era.Parte)
Virginia Bentson
Hoy, como nunca antes en la historia, la mujer goza de amplia
libertad para desplazarse dentro de todas las áreas del quehacer humano. Actúa
como policía, como militar llevando fusiles, tiene acceso al mundo de la
política en todos sus niveles, surca el espacio en satélites, ocupa puestos
ejecutivos y gerenciales, se dedica a la investigación científica, inicia y
milita en campañas de toda índole, ofrece programas televisivas como guionista
y presentadora... y la lista continúa larga. Sin embargo, millones de mujeres
confiesan su frustración e infelicidad.
Por eso, ofrecemos esta primera entrega para señalar varios
ingredientes que pueden asegurar una vida femenina bien realizada, útil y
feliz.
1. Dios
ha honrado a la mujer. La hizo a su imagen igual como
al hombre. Fue creada para ser un vaso hermoso de alabanza y gloria para su
Creador. La creó con un espíritu sensible y un corazón tierno para responder
tanto a él como a todos los que la rodean. Su valor se basa en que Dios la
acepta total e incondicionalmente como es: mujer.
2. Es
imprescindible que toda mujer se acepte. El
antiguo mandamiento da orientación acertada: "Amarás a tu prójimo como a
ti mismo". Enfatizamos: "...como a ti mismo". Amarse a sí misma
no equivale ser egoísta. Es más bien reconocerse como un ser digno, con
derechos y responsabilidades. Es honrar a quien Dios honra.
3. La
mujer, más que el hombre, es consciente de su cuerpo.
Su físico, aunque no tiene la fuerza como la del hombre, es más bello. Dios lo
quiso así. La Biblia hace mención de la excepcional belleza de Sara (Gén.
12.11, 14) , Rebeca (Gén. 24.16) y Raquel (Gén. 29.17). El cuerpo de la mujer
es importante, así que cada mujer debería cuidar bien de él.
Este cuidado comienza con la dieta. Felizmente hoy se resalta
por revistas y periódicos sana orientación acerca de los valores dietéticos de
verduras, legumbres, frutas y cereales. (Se recomienda consumir más pollo y
pescado y menos carne.) Una buena dieta es la base física para la buena salud y
la belleza. Así se previene la diabetes, el colesterol, la alta presión
sanguínea y el sobrepeso, y cuántos males más. Para el antiguo Israel, Dios les
dio normas y leyes dietéticas que contribuían a la buena salud de su pueblo.
(Ver Lev. 11-15; I Tim. 4.1-6, donde el apóstol Pablo advierte y recomienda lo
importante de los alimentos.) Además, un adecuado ejercicio físico, según la
edad de la mujer, debe acompañar la buena dieta.
(Sobre nutrición, ver
http://www.seh-lelha.org/horus/alimento.htm)
4. La
vestimenta, el modo de vestirse, debe reflejar también la imagen que la mujer
tiene de sí misma. Le corresponde a la mujer
conocer el estilo y tipo de ropa que favorece su cuerpo para poder verse
esmeradamente elegante. Ella se honra adecuando su concepto y forma de vestirse
con su edad y nivel social y económico. Exageraciones y desaciertos en este
rubro de la vida no le traen honra. La escritura exhorta: "Que la belleza
de ustedes no sea la externa, que consiste en adornos tales como peinados
ostentosos, joyas de oro y vestidos lujosos" ( I Ped. 3.3). Es innecesario
recordar que en la vestimenta de la mujer no cabe lugar alguno para una
insinuación provocativa. Lo modesto, lo pulcro, es el estilo cristiano.
5.
Comúnmente, se comenta que el hombre se mueve más por su intelecto y la mujer
por sus sentimientos. Sin negar la medida de verdad
que esto encierre, no obstante afirmamos que la mujer necesita alimentar su
vida intelectual, ampliar sus conocimientos y desarrollar su capacidad
intelectual.
Para comenzar, ella debería adquirir del hábito de leer.
Leyendo, una entra en un universo sin límite. Puede seleccionar de una
amplísima gama de lecturas según su gusto e interés. No es cuestión de una hora
por día. Puede ser por diez minutos al día, o en un día de la semana dedicar
una media hora al enriquecimiento de sus conocimientos. Lo importante es la
dirección que una toma, no la velocidad. Conocer más al mundo donde vivimos es
honrar al Creador.
¿Qué de interesarse en la música, o la pintura, o la historia
o en manualidades? O en aprender un idioma nuevo o repasar uno que estudió hace
años en el colegio? ¡Cuán bueno es amar la vida e ir descubriendo las
interesantes y fascinantes facetas que la componen!
Al mencionar lo de la inteligencia, cabe ocupar un poco de
espacio para señalar un nuevo enfoque que se le está dando en los círculos
académicos. Tradicionalmente, se ha pretendido medir la inteligencia de una
persona a través de los test de "cociente intelectual", o sea en base
a la capacidad de la persona de resolver problemas matemáticas, o de física, de
metafísica, o por su rapidez en aprender de memoria y ejercer un poder
retentivo. Tales personas eran consideradas intelectualmente superiores. Pero a
nivel mundial se ha comprobado que estas personas ¡no son las que
necesariamente triunfan en la vida! Hoy se habla de medir el intelecto de una
persona, no solo por su "saber", sino por su "ser" y su
"hacer". Es decir, por la asimilación de su saber y sus valores
(ser), y por sus habilidades y capacidad de entrega y compromiso (hacer). Se ha
dado un nombre a este nuevo enfoque: "inteligencia emocional". Por
cierto no se refiere a las emociones y afectividad, como algunos han creído.
"Hace referencia -explica el sacerdote Gregorio Iriarte, profesor
universitario en Bolivia-a toda la complejidad del ser humano: autoestima,
autodependencia, optimismo, relaciones humanas, simpatía, capacidad de trabajar
en grupo, facilidad de expresión, sentido artístico, etc. Las personas que
logran más éxitos en la vida no son, precisamente, aquéllas en que predomina el
tipo de inteligencia lógico-matemática, sino aquéllas que saben combinar los
dictados de la razón, con los sentimientos, las buenas relaciones humanas, las
emociones."
¿Qué significa esto para nosotras? Debemos librarnos de un
complejo de inferioridad, si es que lo sufríamos, pues por no ser tan
"inteligentes" como otras y otros, no somos menos. Desde donde
estamos en nuestro desarrollo intelectual podemos y debemos seguir el camino
del desarrollo integral: aumentar y expandir nuestro conocimiento y conceptos
sobre la vida, el sufrimiento, las riquezas, la pobreza, la producción, la
educación, la familia, la familia de las naciones, el gobierno y soberanía de
Dios sobre toda su creación, las misiones, etc., ¡y ser útiles, respetadas,
amadas y felices! En fin, deseamos ir recuperando más y más el diseño original
de Dios para nosotras, y crecer en la imagen del que nos creó.
Gracias Virginia por tu sabiduría y amor!!!
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