CRECIENDO CON JESÚS EN LA VIDA COTIDIANA Sara Siccardi de Díaz

La vida física y la vida espiritual

• Cuando una persona recibe a Cristo en su corazón decimos que "se convierte a Cristo". En efecto, ha decidido entregarse al Señor, amarlo, seguirlo, obedecerlo y vivir para El
• Cuando esta decisión y este acto son hechos "en serio", con verdadera conciencia, con determinación, en forma definitiva, la Biblia dice que esa persona nace de nuevo" (Juan 3.3-7).
• "Nacer de nuevo" significa un cambio radical, una revolución en la vida. Ahora todo es nuevo. ¡Estamos de estreno¡ (2 Corintios 5:17). Suceden muchas cosas trascendentes. Es el tiempo de grandes cambios.
Se renuncia a la vieja vida y comienza una nueva (Efesios 4..22-24).
Se emprende un nuevo Camino, se cambia el rumbo (Hebreos 10:20).
Se cambia el estilo de vida (Efesios 5:8).
Se cambia la manera de pensar (Romanos 12-2).
Se convierte en ciudadano del Reino de Dios (1 Tesalonicenses 2-12 ; Lucas 12:32).
Se convierte en miembro de la Familia de Dios (Juan 1.12).
Se pasa del Reino de las Tinieblas al Reino de Dios (Colosenses 1 13).
El elemento más importante después de NACER es CRECER.

• Nacemos bebés en la familia biológica.

También nacemos bebés en la familia de Dios.

• Necesitamos crecer sanos y fuertes en la familia física (no crecer es una anormalidad).
• Necesitamos crecer en la familia de Dios (no crecer, estancarse, convertirse en "enano espiritual" es absolutamente anormal).

Hay signos vitales de vida y salud en la vida física.
Hay signos vitales de vida y salud en la vida espiritual.
Hay elementos indispensables para crecer en la vida física.
Hay elementos indispensables para crecer en la vida espiritual.

2. Elementos básicos del crecimiento

Signos vitales de vida y salud

• En la vida humana hay ciertos signos que determinan si una persona está con vida y en salud. Se los llama los "signos vitales".
Pulso. Frecuencia cardiaca.
Respiración. Frecuencia pulmonar.
Tensión arterial.
Temperatura.
Párpados.
• Para mantener en función normal los signos vitales hay elementos indispensables como
Alimentación.
Respiración.
Movimiento, ejercicio.
Higiene.
Equilibrio, etc.
En la vida espiritual (o sea, la que adquirimos con la salvación) hay seis elementos básicos, sin los cuales, los signos vitales de vida y salud del creyente se debilitan y pueden llevar la vida espiritual a un estado de gravedad alarmante, y aún, desesperante. Ellos son:

Salvación:

Confesión - Higiene para eliminar toxinas y microbios. Oración - Respiración. Salvación Lectura de la Biblia - Alimentación. Obediencia o rendición - Equilibrio metabólico, Testificar - Ejercicio, movimiento. Congregarse - Unión e interdependencia de los miembros del cuerpo.

Confesión de Pecados
 

"Si confesamos y nuestros pecados,
él es fíel y justo para perdonar nuestros pecados,
y limpiarnos de toda maldad."
I Juan 1.9

“El que encubre sus pecados no prosperará 
mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.
Proverbios 28:13
 

• El cuerpo humano tiene que defenderse continuamente de enfermedades, toxinas, gérmenes, virus, microbios. Las "reglas de higiene" están para ayudar al
cuerpo a defenderse y librarse de todos esos enemigos y mantenerse en higiene y salud.
• Cuando nos convertimos a Cristo todos los pecados que teníamos hasta ese momento son perdonados y nuestros sucios corazones son lavados en la preciosa sangre de Cristo (¡Estamos limpiosl). Pero ¿y después?
• ¿Nunca más volvemos a pecar?
- Sí, volvemos a pecar, porque vivimos en un mundo totalmente infectado de pecado. Nuestros pies se manchan en el andar diario (Juan 13.6-10). El creyente peca:
- Por debilidad.
- Por descuido.
- Por necedad.
- Por rebeldía, etc.
¿Cuál es la diferencia con el estado anterior a la conversión?
El creyente comete circunstancialmente pecados pero ya no practica el pecado, como cuando era inconverso (1 Juan 3.8,9; 5.18).
Pero el creyente ha sido llamado a vivir en santidad, como hijos que crecen a la semejanza del Padre (I Corintios 1.2, Efesios 1.4, Filipenses 2.15; I Pedro 2.9 y otros).
- La manera de mantenernos limpios y fortalecernos así en una vida de santidad es por medio de la CONFESIÓN de los pecados que se van cometiendo I Juan 1: 7-10; 2: 1 ).

Así como nos lavamos e higienizamos diariamente para mantenernos limpios, así también la práctica de la CONFESIÓN debe ser diaria para mantenernos santos, limpios, puros y transparentes.
 

	¿Qué es el pecado?
	1. Es una ofensa contra Dios. - Es hacer lo que a Dios no le gusta. - Tiene tres expresiones. Pecados de comisión – Hacer el mal (Gálatas 5.19-21; Apoc. 21.8) Pecados de omisión - No hacer el bien (Santiago 4:17) La obra carnal (Gálatas 5:16-17 y Gálatas 6.8) - Esto tiene más que ver con los motivos por los que se hacen las cosas. Las acciones pueden ser buenas, pero los motivos son malos, Ejemplos: Hacerse ver (Mateo 6:5 y Mateo 6,1-2) Servir al ojo" (Efesios 6:5-6), etc. Debemos ver el pecado en su cruda realidad (Isaías 1:5-6) a. Una de las grandes diferencias entre el creyente y el inconverso es el concepto que cada uno tiene del pecado. El espíritu de este siglo es mínimizar el pecado, no darle importancia y aún exaltarlo (Isalas 5:20) Lamentablemente ese espíritu ha invadido a muchas iglesias y para retener y no ofender a mucha gente hacen "la vista gorda" y toleran y pasan por alto muchos pecados. b. El verdadero creyente debe VER al pecado como Dios lo ve. c. Recordemos que el pecado provocó la agonía y la muerte de nuestro Señor, Recordemos el Getsemaní y el Calvario (Isalas 53:1-7, Mateo 26-.36-46 y Mateo 27:32-56) d. La Biblia lo compara con la lepra (Isalas 1:5-6; 64:6) e. Entristece al Espíritu Santo (Efesios 4.30) f. No hay tal cosa como pecados veniales y pecados mortales, mentiritas "blancas", pecados inofensivos. El pecado NUNCA es inofensivo, siempre nos lastima, nos muerde, nos araña. El pecado siempre "trae cola". El pecado jamás tiene justificación. El pecado es siempre pecado. Debe ser siempre repulsivo y aún causarnos horror y jamás acostumbrarnos y sentirnos cómodos con él.
	¿Qué efecto tiene el pecado en el creyente?
	a. Mancha y arruina la vida y el testimonio (Isaías 1.5,6)   b. Intercepta la comunión con Dios (Isaías 59.1,2)   c. Estorba la respuesta a la oración (Salmo 66. 1 8 "mirado" aquí significa aprobar, tolerar, disculpar).   d. No podemos ser usados (II Timoteo 2.20-21 y Hebreos 12: 1)   e. Empaña la "marca de familia" (santidad) (I Pedro 1, 14-16)   f. Desfigura la imagen de Cristo (Romanos 8.29 y I Corintios 15.49)   g. Nos mantiene derrotados, hace mal a terceros e impide la marcha de la iglesia (Josué 7:10-12)
	¿Cómo librarse de los pecados cotidianos?
	a. La mejor manera es "andar en el Espíritu", vivir en obediencia, en total dependencia del Señor, tomado fuertemente dé Su mano, y aferrado a El como la hiedra a la pared, de forma que estemos alertas a las artimañas del diablo y sensibles a todo lo que ofende a nuestro amado Señor. Y bajo su mano poderosa, ser guardado cada vez mas del pecado.   b. Pero, así y todo, mientras estamos en esta tierra, volvemos a cometer pecados. Para esto, el Señor nos ha dado el maravilloso recurso de la CONFESIÓN (Proverbios 28:13; 10 Juan 1.9, Salmo 32:5; Salmo 51; Levítico 5:5).
	¿Qué es la confesión? NO ES solo pedir perdón "Señor, te pido que perdones todos mis pecados". Eso es muy vago e indefinido.   a. Confesar pecados al Señor es decirle a El, lisa y llanamente, el mal que hemos hecho. Mencionar el pecado por su nombre, sin rodeos y sin generalidades indefinidas. Ejemplos: • "Señor, he criticado a Fulano a sus espaldas" • "Señor, he dicho tal mentira" • "Señor, he robado dinero de mi patrón..." etc.   b. Confesar es como mostrar una llaga o una herida (por fea o repulsiva que sea) al médico a fin de que pueda limpiarla y curarla.   c. Confesar es sacar a luz lo que está escondido. • Mientras está oculto "en tinieblas" está bajo el dominio y jurisdicción de Satanás, rey del Reino de las Tinieblas. • Cuando lo confesamos, lo exponemos a la luz de Cristo, rey del Reino de la Luz. d. Confesar es la única manera de obtener limpieza y sanidad. - Lo contrario de confesar es: • Justificar. "No me di cuenta", "No quise decir eso", etc.  • Ocultar. "¿Yo?... ¡Noooo!" • Minimizar. "No es tan grave". • Generalizar. "Todos lo hacen". • Disimular o "maquillar", usar eufemismos, Por ejemplo: Decir "me equivoqué" en vez de "pequé".  Decir "una pequeña falta" en vez: de "pecado". Decir "un pequeño resbalón" en vez de "caí en pecado".
V.	¿ A quién confesar?
	a. A Dios siempre (Salmo 32.5). - No olvidemos que todo pecado es, en primer lugar, una ofensa contra el Señor.   b. A algún hermano. (Santiago 5:16). Este tipo de confesión tiene dos aspectos:   1. cuando nuestro pecado dañó a otro, debemos confesarlo- a la persona afectada. Esto se llama RESTITUCIÓN. - Devolver lo que le sustrajo. - Arreglar lo que rompió en un "ataque de bronca". - Pedir perdón al que insultó o trató con rudeza, etc, etc, etc. - Restituir el honor al que calumnió, etc.   2. El otro aspecto es confesarlo a algún hermano confiable, maduro en el Señor (Pastores, líderes, padres, etc.) (Santiago 5.16). Esto es saludable para el alivio de un alma cargada y agobiada por la culpa. Compartir el dolor de la caída y el gozo del perdón con otro hermano fiel, es de mutua edificación.   c. A la iglesia Cuando el pecado cometido hirió a toda la iglesia, manchó su testimonio de santidad y transparencia y trajo mucho dolor colectivo, es bueno, saludable y sanador confesarlo ante todos y experimentar el gozo y la paz que trae el perdón y la aceptación de una hermandad con corazón y brazos abiertos.
	¿Cómo confesar?
	a. En oración a Dios,   b. Nombrando directamente el pecado cometido,   c. .Si no estamos conscientes de todos, cabe la oración de David en Salmo 139.23,24.
	¿Cuándo confesar?
	a. Enseguida que somos conscientes de haber cometido pecado,   b. Cuando el Espíritu Santo nos señala y redarguye.   c. Cuando hay arrepentimiento, convicción y anhelos de apartarse de¡ pecado.   d. Es bueno hacer de la confesión un "hábito" diario, como el de higienizarse cada vez que se ensucia.
	¿Qué peligros hay al no confesar sistemáticamente?
	a. Crea una conciencia cauterizada. I Timoteo 4.2 - Esto es, perder la sensibilidad, al horror del pecado. Romanos 7.24 - Acostumbrarse a "convivir" con él a cuestas, de manera que nuestra "nariz u olfato espiritual" ya no percibe el hedor, el olor a podrido del pecado. - Si uno no se concientiza por la Palabra de lo serio que es el pecado, uno puede llegar a tomarlo muy livianamente, tenerlo como "pecaditos", no tratar nunca con él, hacer la "viveza" de esconderlo y seguir así, guardando las apariencias de buen creyente, mientras acumula llagas en su corazón. Eso lo convierte en HIPÓCRITA.   b. Por el contrario, puede desarrollar un destructivo complejo de culpa, sintiéndose continuamente acusado. Apocalipsis 12:10 nos revela que uno de los oficios continuos de Satanás es el de acusarnos delante de Dios y de nosotros mismos "!Viste que ya volviste a pecar! ¡Nunca vas a cambiar!" etc. Esto lleva al desanimo, quita la paz y el gozo, lleva a bajar los brazos y decir "No vale la pena".

En resumen:

• Satanás tiene fuertes razones para haber logrado que el tema del arrepentimiento y la CONFESIÓN no sea suficientemente enfatizado en las iglesias.
• La práctica y el hábito constante del arrepentimiento y CONFESIÓN elimina las toxinas, gérmenes y microbios del pecado, por el constante fluir de la Sangre limpiadora y sanadora de Cristo (I Juan 1.7). Esa higiene da salud y vitalidad al creyente y por ende, a toda la iglesia.
• A través de la CONFESIÓN el creyente mantendrá:
-Las cuentas cortas con Dios.
-La correcta actitud hacia el pecado.
-La salud mental y emocional.
-La paz y el gozo.
-La libertad de servir sin arrastrar "lastres". Etc, etc, etc.
 
La confesión, al eliminar el pecado, mantendrá en funciones normales los signos vitales del creyente.

Para Meditar

Salmo 51; Levítico 5:5; Salmo 32:3-5; Proverbios 28:13; I Juan 1:9
 

Para Reflexionar

1.	¿Ves el pecado tomo lo ve Dios?
2.	¿Mides el pecado con los parámetros del Reino de las Tinieblas, o sea, de este presente siglo malo"? (Gálatas 1:4).
3.	¿Actúas con hipocrasía? o ¿te agobia un sentimiento de culpa?
4.	¿Qué pecado vienes escondiendo de hace mucho? ¿Qué pecado escondiste esta semana? ¿Qué pecado escondiste hoy?
5.	¿Anhelas, de veras, una vida de limpieza y transparencia ante Dios y los demás?

Para Orar

"Señor, gracias por poner a nuestra disposición el recurso de la confesión. ¡Gracias porque a través de ella obtenemos el perdón y tu sangre preciosa nos limpia y purifica! ¡Gracias por el alivio y descanso que nos proporciona! Te pido que yo nunca deje de VER el pecado como Tu lo VES. Que nunca me acostumbre ni me sienta.cómodo con el. Que crezca en mi cada día el anhelo de ser limpia, pura y santa como lo eres Tu. En Tu Nombre. Amén".

 

Para Cantar

Hoy escudriña, oh Dios, mi corazón.
En lo secreto tu mirada pon.
Ve si en mi perversidades hay
Por sendas rectas guíame por Tu amor

Preciosa sangre, preciosa sangre,
Preciosa sangre que me limpia de todo mal.
Aleluya, Aleluya,
Aleluya por la cruz.
Aleluya, Aleluya,
Por la sangre de Jesús.

Escudriñemos nuestros caminos
Y volvamos a Jehová.
Levantemos nuestras manos al Señor.
Levantemos nuestras manos
Al Dios de los cielos, 
Y volvamos a Jehová, nuestro Dios.